miércoles, 19 de octubre de 2011

Cómo comunicar una mala noticia

Lo más probable es que personas que generalmente se dedican a tomar decisiones piensen cuales son las ventajas e inconvenientes de tomar una postura u otra, a quien afecta y cómo y cuales son los beneficios obtenidos con la toma de decisiones... ¿pero dedicarán tanto tiempo y esfuerzo en buscar la mejor manera de comunicar esas decisiones? En mi caso no.

Tras un periodo de merecidas vacaciones, creyendo mi puesto estable y consolidado, me comunican media hora antes del cierre que probablemente a mi regreso mi silla esté ocupada por otra persona. Tal cual lo escribo, así me lo comunican, bueno antes añaden que ellos también lo están pasando muy mal y que es lo mejor para mi...¡Ja, ja! perdona que lo dude, creo que no se cansan del chantaje emocional. Señores eso está muy trillado en esta nuestra empresa.

Voy a limitarme a contarlo en líneas generales, no voy a entrar en la bajada de salario, el aumento de horas, la distancia de 65 Km de mi hogar al trabajo, la nocturnidad no pagada y el desorbitante cambio de responsabilidad que se me echa encima, paso de ser responsable de un ordenador y un teléfono a ser la patria potestad de cinco menores tutelados por una institución pública, con una variedad sonante y contante de peculiaridades familiares (por llamarlo de alguna manera).

Así es como comienza mi vuelta al trabajo y luego la gente no entienden de traumas postvacacionales